Vivo a caballo entre Dima y Bilbao. Reconozco que me gusta estudiar. En ello he invertido bastante tiempo de mi vida. No he seguido un itinerario formativo al uso. Estudié en las escuelas públicas de Dima e Igorre y posteriormente Formación Profesional en Zulaibar, lo que me permitió trabajar desde muy joven compatibilizándolo con el estudio y pudiendo así pagar la universidad. Diplomada en empresariales en la escuela universitaria de estudios empresariales de la EHU/UPV y Licenciada en antropología en la Universidad de Deusto, los créditos de libre elección los cursé en periodismo en la EHU/UPV.

De 47 años que tengo llevo 6 en política, anteriormente he trabajado durante más de 20 años en el ámbito de la dinamización sociocultural y posteriormente en la gestión administrativo-financiera como liquidadora de tributos en Hacienda y como jefa de sección en Cultura de la Diputación Foral de Bizkaia. Allí volveré cuando esta etapa termine, porque estoy comprometida con el servicio público tanto desde la política como desde la función técnica.

Soy una Arratiana irrintzalari. Sí, además de cantar y bailar me gusta echar irrintzis, gritos de alegría, de fuerza, de resistencia propios del PuebloV asco y sobre todo de las mujeres vascas. Creo en la fuerza de las personas y de los pueblos para superar y crecerse ante las dificultades. Confío en la alegría para generar energía positiva que permite trabajar en clave constructiva huyendo del insulto y de las descalificaciones ¡no hay energía más sostenible que la alegría! Apuesto por la cultura de los pueblos como elemento de cohesión social.

Me enorgullece que en Euskadi, sin perder nuestros elementos identitarios, seamos capaces de evolucionar hacia una sociedad equitativa, solidaria, mestiza y plural donde la gente que aquí vivimos nos sintamos vascas y vascos en plano de igualdad. Y a ello dedico todo mi esfuerzo como parlamentaria en un partido abertzale y humanista como EAJ-PNV.