Nací en Ullibarri-Arana, Valle de Arana, en plena Montaña Alavesa. Eso imprime carácter. En la manera de afrontar las dificultades de la vida, de entender la convivencia y de ejercer la solidaridad. Y, también, el compromiso político que para mí ha sido, desde muy joven, el del EAJ-PNV.

Probablemente la pasión por el medio natural  fuera el motivo principal de mi formación como ingeniera agrícola, y lo que me llevó a ejercer en las Parzonerias de Entzia e Iturrieta, también lo que ha propiciado mi interés personal y profesional por todos los bienes naturales de Araba. Desde los perretxikos de los bosques que camino, hasta el txakolí de Aiala o el aceite de la Rioja Alavesa, que os invito a degustar.

De la Juntas Generales al Parlamento, de la Diputación Foral al Gobierno, la pasión por mi tierra y sus gentes es el nexo de unión de toda mi actividad política entendida como entendemos en Ullibarri-Arana el auzolan: compromiso personal y trabajo en equipo.

Lo que ahora desarrollo al frente de un amplísimo equipo de personas que se ocupan cada día de nuestra seguridad y, por tanto, de nuestro bienestar. En el Departamento de Seguridad, donde, como Consejera, trato de aplicar siempre los principios que animan mi compromiso político.

Disfruto de mi tierra y de mi gente. Compartiendo las tertulias de Santa Teodosia, las tradiciones de nuestros pueblos; recorriendo los  senderos de la sierra de Entzia o ascendiendo a Arnaba.